viernes, 6 de febrero de 2009

Vacas flacas y grandes clásicos: cinco novelas para atravesar la CRI$I$

Por Céline Ngi

Se tenía tendencia a decir que la vida no puede aprenderse (más que) en los libros. Sin embargo, un nuevo estudio, llevado por investigadores de la Universidad de Washington, con base en Saint Louis, muestra lo contrario: lejos de desconectar de la realidad, la lectura daría los medios para afrontar ciertas situaciones de la realidad… ¿Qué libros haría falta entonces haber leído para atravesar la crisis de 2009?

Es un artículo de The Guardian el que nos informa sobre este estudio, lanzado por el Departamento de Ciencias Cognitivas de la Universidad de Washington. Exámenes llevados a cabo sobre numerosos participantes han revelado que la lectura, lejos de ser una actividad pasiva, estimula considerablemente la actividad cerebral del lector, en función de los contenidos del libro en cuestión. Por ejemplo, si se hace mención de un personaje que tira de una cuerda, será la región del cerebro que controla nuestros movimientos para tomar objetos la que se encontrará en plena actividad. La lectura permitiría entonces al lector asimilar toda situación encontrada en el relato, para poder reaccionar en la vida real frente a una situación similar. En otros términos, leer las aventuras sentimentales desastrosas de Bridget Jones ayudaría a las mujeres a administrar mejor su vida amorosa…
Tan simple como eso. Si se cree en los resultados de este estudio, leer permitiría mejorar más o menos en todos los dominios: el deporte, la cocina, las relaciones sociales... Se podría entonces imaginar una biblioteca ideal, cuyos libros nos ayudarían a afrontar más fácilmente diversas situaciones. Como el año 2009 se anuncia definitivamente como el año de la crisis, ¿qué libros podríamos leer para sobrellevarla mejor?
He aquí una pequeña selección de novelas que los sumergirán en situaciones de falta de dinero probablemente mucho peores que las de ustedes:

Das Kapital de Viken Berberian

Donde aprenderemos que estar obsesionado por el beneficio puede volverse violentamente contra uno. Novela de elocuente título, Das Kapital sigue las huellas de Wayne, un empresario conectado permanentemente y dispuesto a todo para que sus ganancias aumenten. Una lectura que lo volverá a usted operacional ante las curvas y los gráficos del mercado, pero que le recordará también que no se abusa de esas cosas.

La ruta: Los vagabundos del riel de Jack London

Donde aprenderemos cómo recorrer un país (en este caso, los Estados Unidos) a lo largo y a lo ancho, sin un centavo en el bolsillo. El hambre, la soledad, la clandestinidad: viviremos aquí todas las situaciones atravesadas por el escritor mismo, cuando a los 18 años elige dejar su trabajo para ir a descubrir el mundo. De Jack London, para adentrarnos un poco en la miseria, podremos leer también El pueblo de abajo, testimonio sobre los bajos fondos de Londres, en una época que se nos representa en negro y blanco, y más bien negro que blanco.

Los racimos de la cólera de John Steinbeck

Donde aprenderemos cómo sobrevivir, primero a la ruina, a continuación a la explotación por parte de propietarios inescrupulosos (en este caso, californianos). La novela de Steinbeck redibuja, a través del recorrido de la familia Joad , la gran depresión de los años 30, con la cual la crisis actual ha sido comparada muchas veces. Del mismo autor: Tortilla Flat, crónica de un barrio pobre de Los Ángeles.

En la pobreza en París y Londres de George Orwell

Donde aprenderemos a vivir... con falta de dinero en París y en Londres. George Orwell se encontró durante el período de entreguerras en un galeón sagrado. Sin otra opción más que la de aceptar pequeños trabajos (en un gran palacio parisino, luego en los ferrocarriles londinenses) , trajinar quince horas por día por algunos centavos, con el único consuelo de tener libre el fin de semana siguiente... Los tiempos son duros, arremánguense.

Germinal de Emile Zola

Donde aprenderemos cómo reaccionar frente a malas condiciones de trabajo o a una reducción de salario. En el capítulo de los clásicos, evidentemente es el momento de retomar los Rougon-Macquart, y más particularmente el episodio minero, de manera que podamos decirnos que antes no era forzosamente mejor que ahora.

He aquí entonces qué tener a mano en caso de gran desconcierto. Evidentemente se sabe que en detrimento de toda la credibilidad que implica un estudio científico, no está dicho que la lectura de los libros anteriormente citados no provoque el efecto inverso al que se busca: en lugar de ayudar a ustedes a afrontar la crisis, puede también desplomarlos.


Fuente: http://www.fluctuat .net, 05/02/09, 10:40